Dependiendo de la calidad hidroquímica, la accesibilidad en las distintas épocas del año y la disponibilidad asociada con los periodos hidrológicos, las poblaciones rurales de secano en regiones semiáridas y áridas del país recurren para su abastecimiento a represas o balsas alimentadas por agua de lluvia, aljibes y pozos calzados o perforaciones para explotar el agua subterránea así como a vegetales que funcionan como reservorio o depósitos de agua (Arenas, 2003). La percepción de las características térmicas, táctiles y organolépticas, en particular el sabor, constituye un criterio cultural de influencia decisiva entre los nativos a la hora de elegir el tipo de agua que consumen o utilizan, el cual resulta independiente de la aptitud y calidad microbiológica de las mismas (Martínez, 2009).
El presente trabajo se desarrolla en el marco de un proyecto de investigación sobre etnoecología y salud ambiental con comunidades tobas (qom) del Chaco Central, en la región del Impenetrable, siendo sus objetivos específicos:
- Caracterizar desde el punto de vista físico-químico la calidad de las diferentes fuentes de agua para consumo y uso cotidiano.
- Relacionar las cualidades perceptuales (especialmente el sabor) con los parámetros físico- químicos de las distintas fuentes de agua.